Considerado como un prometedor combustible futuro, Nestlé, en colaboración con sus proveedores ID Logistics y Masiques, ha optado por reemplazar el diésel utilizado en parte de su flota de camiones con combustible renovable HVO (Hydrotreated Vegetable Oil, en inglés), suministrado por Repsol en España.
En esta iniciativa, las tres empresas han lanzado un proyecto piloto que se está implementando en seis camiones responsables de dos rutas logísticas fundamentales para la compañía de alimentos.
La medida se ha implementado desde el pasado mes de noviembre por medio del uso de este biocombustible avanzado, derivado de aceites vegetales reciclados, en dos camiones encargados de transportar café verde desde el Puerto de Barcelona hasta la fábrica de Girona.
Además, otros cuatro megatrailers que operan en la ruta cerrada entre el centro logístico de la empresa en Guadalajara y la mencionada fábrica en Girona también incorporan este biocombustible.
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Nestlé reduce su impacto de emisiones
Estos biocombustibles avanzados destacan por su origen en materias primas renovables. Aunque en este proyecto piloto se emplean principalmente aceites de cocina usados, se contempla la posibilidad de utilizar otros residuos agrícolas y forestales, entre otros, en el futuro.
De esta manera, al optar por estos biocombustibles, Nestlé promueve la economía circular y logra una reducción del 80% en las emisiones de gases de efecto invernadero por kilómetro, en comparación con el uso de combustibles fósiles como el diésel.
Asimismo, la aplicación de este combustible avanzado, sostenible y renovable, es completamente compatible con los vehículos de motor de combustión actualmente en uso por Nestlé.
Por esta razón, la empresa alimentaria tiene planes de expandir este proyecto piloto a otros camiones y proveedores logísticos con los que colabora en los próximos meses.