El gigante de comercio electrónico, Amazon, ha ejecutado importantes estrategias en el sector transporte para no solo mejorar su eficiencia sino aportar a la protección del medio ambiente a través de su operatividad.
Para ello, la compañía ha llevado a cabo una serie de planes con el objetivo de alcanzar las cero emisiones netas de carbono y ayudar a mitigar los terribles efectos del cambio climático.
En ese sentido, Amazon ha optimizado y transformado su red de transporte mediante innovaciones tecnológicas, mejoras y soluciones alternativas que entregan los pedidos a sus clientes de una forma más sostenible.
Inversión en vehículos eléctricos
Amazon destinó grandes sumas de su presupuesto a la adquisición de 100 mil furgonetas de reparto eléctricas, con el objetivo de ahorrar millones de toneladas métricas de carbono al año. Se trata del mayor pedido de coches electrificados hasta la fecha al fabricante Rivian, en las afueras de Detroit.
La compra de los autos forma parte de “The Climate Pledge”, el plan de Amazon para cumplir el Acuerdo de París 10 años antes de lo que estipula, es decir, en 2040. El compromiso también pide a los signatarios que se conviertan en cero emisiones netas de carbono en sus negocios para 2040.
Ross Rachey, director de flota y productos globales de Amazon, destacó que la meta es construir la flota de transporte más sostenible del mundo, el más funcional, el de mayor rendimiento y el más seguro.
El equipo de transporte de Amazon pasó 18 meses evaluando una variedad de opciones de vehículos eléctricos para reducir su huella de carbono. Para moverse rápidamente, la plantilla de Rachey se dio cuenta de que la mejor manera de avanzar era trazar su propio camino y crear un nuevo prototipo personalizado para satisfacer las necesidades de la empresa.
Los coches reducirán las emisiones de carbono, elevarán el nivel de seguridad del conductor y optimizarán la tecnología y los elementos de diseño para crear la mejor experiencia del chofer en su clase.
“Nos enfocamos en impulsar la eficiencia en todos los aspectos del diseño del vehículo: todo, desde la calefacción de la cabina hasta la ergonomía del conductor y el diseño del tren motriz se han optimizado en términos de tiempo y energía”, explicó R.J. Scaringe, CEO de Rivian.
Ampliación de la flota
Además de estos vehículos eléctricos de reparto personalizados, Amazon ya cuenta con miles de autos electrificados circulando por todo el mundo, que reparten más de 20 millones de paquetes a los clientes de América del Norte y Europa desde 2020. Se ha realizado una ampliación con un pedido de 1.800 furgonetas eléctricas a Mercedes-Benz, una de las empresas firmantes de The Climate Pledge.
Infraestructura
Amazon no solo se ha enfocado en la adquisición de coches eléctricos, sino que también le ha hecho frente al flagelo de la infraestructura de carga que aún luce como una de las debilidades de estas nuevas tecnologías.
A medida que la compañía ha expandido su flota eléctrica de reparto por todo el mundo, ha contribuido en la infraestructura de apoyo para los vehículos y choferes.
Para ello, readaptaron las instalaciones existentes con tecnología de carga y añadieron miles de puntos de recarga adicionales, para que las puedan utilizar los socios de Amazon en América del Norte y Europa. Existen más de 50 estaciones de reparto de la empresa en esos territorios equipadas para el uso de vehículos eléctricos, y todas las estaciones de reparto nuevas se diseñan con la distribución física y capacidad eléctrica necesarias para dar cabida a las necesidades actuales y futuras.
Cabe destacar que Amazon también colabora con redes públicas de recarga de vehículos eléctricos, para que sus conductores puedan surtir con energía limpia cuando no se encuentren en la red dispuesta por la organización.