El aprovechamiento completo del potencial de la electromovilidad aún enfrenta desafíos pendientes, y uno de ellos reside en el avance de tecnologías de almacenamiento energético de alto rendimiento.
El mismo puedes incluir baterías, sistemas de pilas de combustible o nuevas alternativas tecnológicas en desarrollo. En ese sentido, el proyecto MODALT, en colaboración de AIMPLAS, se ha concebido con el propósito de abordar este desafío de manera efectiva.
Su objetivo es acelerar el desarrollo y la validación de tecnologías de movilidad eléctrica de alto rendimiento, preparando así a la industria para aprovechar nuevas oportunidades de mercado.
Contenido relacionado: General Motors invertirá en Inteligencia Artificial para fabricar baterías a bajo costo
Esta investigación industrial, respaldada por la financiación de la Agencia Valenciana de la Innovación (AVI), se centra en diseño, creación de prototipos, pruebas y validación de un módulo de almacenamiento de alto rendimiento.
Además de su integración en packs de baterías modulares, los packs se destinan a aplicaciones de movilidad eléctrica de alta potencia y eficiencia energética.
En búsqueda de la sostenibilidad
El procesamiento y tratamiento con matrices termoplásticas ofrecen la posibilidad de incorporar partículas conductoras y retardantes de llama, derivando en la obtención de propiedades cruciales como la protección contra interferencias electromagnéticas y la resistencia al fuego.
Al mismo tiempo, el refuerzo con fibras largas posibilita la creación de materiales con una gran rigidez, sin que esto afecte negativamente a su capacidad para resistir impactos.
Como resultado último del proyecto, se desarrollará un módulo de almacenamiento que habrá pasado por rigurosas pruebas experimentales en laboratorio, abarcando ensayos eléctricos, mecánicos y térmicos.
«Desde el punto de vista de los materiales, el uso de composites termoplásticos permite que los materiales que conforman la parte estructural de las baterías, llegados al final de su vida útil, tengan un porcentaje de reciclabilidad superior al de los sistemas convencionales, contribuyendo a la circularidad del sector y convirtiéndolo en uno más sostenible y comprometido con el medio ambiente”, asegura Guillermo Ulldemolins, investigador en movilidad sostenible y del futuro en AIMPLAS.