Banco Nacional de Costa Rica suma nueve estaciones de carga en sus sedes

Con el objetivo de disminuir las emisiones de carbono, ahorrar energía e impulsar el desarrollo tecnológico, distintas instituciones están apostando por la electromovilidad.

En Costa Rica, se estima que hay 75% de ahorro si se usa tarifa eléctrica residencial y de 90% en tarifa horaria. Sin dejar de mencionar el ahorro importante en el mantenimiento, porque los vehículos eléctricos no utilizan aceites, bujías, ni muchas otras piezas.

Con el objetivo de conectar con los esfuerzos de movilidad eléctrica en la nación sudamericana, el Banco Nacional de Costa Rica ya suma nueve estaciones de carga instaladas en sus oficinas en todo el país.

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Sin costo

La entidad financiera destacó que las electrolineras están habilitadas de manera gratuita para los clientes y se ubican en las agencias de San Ramón, La Tropicana en Alajuela; Grecia, Cartago centro, Laurel en Puntarenas, Santa Rosa y Tilarán en Guanacaste y Limón. Las recargas son de velocidad media.

Adicionalmente, el Banco Nacional cuenta con una novena estación en la agencia La Cruz, en Guanacaste, donde la carga es rápida. En esa ubicación el cargador es operado por el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), que establece la tarifa para el cobro del servicio.

Este año la entidad bancaria espera habilitar un cargador más en San José, y en 2024 abrir las estaciones en Filadelfia y Carmona, Guanacaste; así como en Puntarenas centro, Palmares de Alajuela y Cariari de Limón.

Visión a escala nacional

María Brenes, directora general de Relaciones Institucionales y Sostenibilidad  del Banco Nacional señaló que con la instalación de estas estaciones de recarga para vehículos eléctricos se busca generar la ruta verde de la movilidad eléctrica para conectar al país de frontera a frontera y de costa a costa.

“La electromovilidad es una nueva oportunidad económica y de generación de empleo, a la vez que el país reduce la contaminación local y en consecuencia mejora la salud”, subrayó.

En Costa Rica, la electromovilidad ha tomado relevancia durante los últimos años, puesto que permite impulsar la descarbonización.

En 2018 se promulgó la Ley N° 9518 Incentivos y promoción para el transporte eléctrico, que ofrece beneficios para la importación y uso de este tipo de vehículos. 

En 2019, el ICE adquirió 100 vehículos eléctricos para sustituir por unidades de combustión y con esto evitar la emisión anual de 350 toneladas de CO2.  Además, se introduce en beneficio de los conductores de automóviles eléctricos la red de cargadores  para facilitar el desplazamiento confiable a lo largo del territorio.