El Gobierno del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, aprobó más de 1.000 millones de dólares en incentivos fiscales por la compra de vehículos eléctricos en lo que va de 2024.
Un reporte de la agencia de noticias EFE señala que el Departamento del Tesoro y el Servicio de Impuestos Internos (IRS, en inglés) anunciaron que más de 150.000 vehículos eléctricos comprados desde el 1 de enero califican para las desgravaciones fiscales aprobadas.
Unas 125.000 de esas adquisiciones fueron de vehículos nuevos, por lo que el importe a desgravar va hasta los 7.500 dólares, mientras que unos 25.000 fueron vehículos usados, con desgravaciones de hasta 4.000 dólares; un ahorro que se aplica en el momento de la compra detalla un comunicado al que hace referencia EFE.
Las instituciones gubernamentales señalaron que el mecanismo ofrece a los consumidores un importante descuento inicial y amplía el alcance de los créditos al ponerlos a disposición en el punto de venta en lugar de cuando los compradores presentan sus impuestos.
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En ese sentido, la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, destacó que el ahorro en gasolina y mantenimiento de un vehículo eléctrico se calcula en unos 1.750 dólares anuales.
Acciones inmediatas
El efecto del cambio climático a escala mundial evidencia que los gobiernos y la industria deben avanzar en medidas clave para descarbonizar el transporte.
Desde 1850, la actividad humana ha causado la emisión de más de 2.300 gigatoneladas de dióxido de carbono (CO2), según cifras de la Agencia Mundial de Energía.
Más del 68 % de esas emisiones provinieron del uso de energía generada por fuentes fósiles. Es por eso que los científicos advierten que, al ritmo actual de emisiones, al mundo le quedan 28 años para limitar el incremento de la temperatura a 2 °C respecto a la era preindustrial y tan solo nueve años para limitarlo a 1,5 °C.
