Con el fin de trabajar de forma coordinada en el despliegue de una red de puntos de recarga públicos, en la que los usuarios podrán cargar la batería de sus vehículos eléctricos con energía 100% verde, procedente de fuentes de generación renovable, Iberdrola y Volvo han suscrito un llamativo acuerdo.
El plan que llevarán a cabo ambas compañías comenzará en España con una inversión de 150 millones de euros. Esta cifra será el punto de partida para intensificar el despliegue de puntos de recarga para coches electrificados en los próximos años.
Iberdrola y Volvo tienen entre sus planes la instalación de cerca de 150 mil puntos de recarga, tanto en hogares, como en empresas, así como en vía urbana, ciudades y en las principales autopistas.
Voltaje y localización
En el marco de la asociación, las empresas detallaron que los centros de suministro contarán con gran potencia al presentar estaciones ultra rápidas de 350 kW, súper rápidas de 150 kW y rápidas de 50 kW.
Los puntos de recarga estarán localizados en la aplicación de Recarga Pública Iberdrola, que incorpora información verificada de todos los cargadores de vehículos eléctricos, tanto de Iberdrola, como los de otros operadores, desde la que se puede geolocalizar el cargador, comprobar su operatividad en tiempo real y reservar y pagar desde el móvil.
Esfuerzo conjunto
La asociación entre Iberdrola y Volvo se complementa de una manera clave, puesto que desde hace más de una década están impulsando iniciativas dirigidas a la reducción de emisiones y sostenibilidad.
Por ejemplo, Iberdrola ha alcanzado más de 50 acuerdos de despliegue de infraestructura con administraciones, instituciones, empresas, estaciones de servicio, concesionarios y fabricantes de vehículos eléctricos.
Asimismo, se convirtió la primera empresa española en suscribir la iniciativa EV100 de The Climate Group, con el objetivo de acelerar la transición hacia los vehículos eléctricos, comprometiéndose a electrificar toda su flota y facilitar la recarga al personal en sus negocios en España y Reino Unido a 2030.
En lo que a Volvo respecta, se ha comprometido a reducir sus emisiones de CO2 en un 40% para 2025, así como el más ambicioso plan de conseguir la neutralidad climática para 2040.
El fabricante también es miembro del Pacto Mundial de las Naciones Unidas (UN Global Compact), concebido para implementar los principios universales de sostenibilidad. Desde el año 2000, Volvo Cars está comprometido a luchar por conseguir los “Diez Principios” que dicta este acuerdo para la consecución de retos medioambientales.
José María Galofré, CEO de Volvo Car España, señaló: “Este acuerdo refuerza aún más nuestros compromisos con la electrificación y permitirá a nuestros clientes recargar sus modelos eléctricos de una forma mucho más cómoda y sencilla”.
Por su parte, Raquel Blanco, directora Global de Smart Mobility de Iberdrola, declaró que la asociación constata el esfuerzo que viene realizando la compañía en colaborar con todos los agentes implicados para impulsar la movilidad sostenible y así dar respuesta al interés de los ciudadanos, por moverse de una forma respetuosa con el medio ambiente.