Con una inversión de 7.500 millones de dólares, Porsche se posiciona como una de las marcas líderes en materia de electromovilidad, con un plan integral conformado por la fabricación de vehículos híbridos, 100% eléctricos e infraestructura de carga.
La firma alemana se fijó como meta para 2025 que la mitad de las ventas serán de vehículos eléctricos y en 2030 el 80% de las transacciones incluirá los dos tipos de trenes de rodaje eléctricos: totalmente eléctricos o híbridos enchufables. La estrategia de venta de Porsche abarca el abastecimiento y la fabricación, el asesoramiento, la venta y el servicio, logística y el reciclaje.
En medio de estos pasos significativos, el presidente del Consejo de Dirección de Porsche, Oliver Blume profundizó acerca de la actualidad de la movilidad eléctrica y los combustibles sostenibles.
En una entrevista para el diario Bild, Blume afirmó que aunque continúan fabricando motores a combustión, la electromovilidad tiene máxima prioridad para Porsche.
“Entre los fabricantes tradicionales de automóviles, tenemos una estrategia eléctrica de aplicación muy progresiva. Nuestra ambición es que más del 80 % de los vehículos entregados a los clientes en 2030 sean totalmente eléctricos”, sostuvo el directivo.
Celebró el éxito que ha tenido hasta ahora el Taycan, primer modelo deportivo 100 % eléctrico de la firma. “El año pasado logramos duplicar sus ventas con respecto al ejercicio anterior, que ya fue bueno, superando las 41.000 unidades. Eso sitúa al Taycan al nivel del icónico 911. Nos vemos como pioneros en movilidad sostenible”, sostuvo.
Combustibles limpios
En medio de la carrera por la electrificación, en Porsche están conscientes que el camino es largo y se deben tomar medidas inmediatas que contribuyan a la protección del medio ambiente. En ese sentido, la empresa teutona respalda ampliamente la utilización de los denominados e-fuels.
“La protección del medio ambiente tiene que entenderse de manera integral. Es por ello que debemos ser abiertos en materia de tecnología. La electromovilidad es importante, pero hay más de mil millones de vehículos circulando en el mundo y estarán en las carreteras durante las próximas décadas”, apuntó Blume.
Explicó que los combustibles sintéticos son una solución complementaria eficaz, puesto que permiten que los coches desempeñen un papel en la reducción de CO₂.
“Los motores de combustión pueden funcionar con e-fuels con unas emisiones de carbono prácticamente neutras. Y no requieren ninguna adaptación para ello. Los combustibles sintéticos se pueden emplear como mezcla o solos, y su suministro se puede llevar a cabo en las estaciones de servicio actuales. Se trata de una opción para los propietarios de los vehículos existentes”, añadió.