La movilidad sostenible en CDMX será una de las protagonistas durante el próximo Mundial de la FIFA 2026. Como una de las ciudades anfitrionas, la capital mexicana se prepara con una serie de transformaciones clave en su infraestructura de transporte.
El objetivo va más allá del evento deportivo: se busca dejar una huella positiva para los habitantes, con nuevas rutas, más seguridad y alternativas limpias.
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Transformaciones clave para una movilidad sostenible en CDMX
La movilidad sostenible en CDMX incluye iniciativas de gran impacto. Una de las más importantes será la creación de una nueva línea de Trolebús que conectará Ciudad Universitaria con Huipulco, pasando por el Estadio Azteca. Esto será fundamental para transportar a miles de personas durante los partidos.
Otra acción destacada es la modernización del Tren Ligero, que operará con 17 nuevas unidades y permitirá duplicar la capacidad de transporte hasta los 400 mil pasajeros diarios. Se incorporará el nuevo Tren Ajolote, diseñado con accesibilidad universal.

También se renovará el Centro de Transferencia Modal (CETRAM) de Huipulco, una pieza clave para articular el transporte masivo en el sur de la ciudad.
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Ciclovías y transporte eléctrico: claves de la movilidad post-Mundial
Como parte de los esfuerzos para lograr una movilidad sostenible en CDMX, se construirá una nueva ciclovía de 36 kilómetros sobre Calzada de Tlalpan. Esta será una de las más largas de la capital y permitirá conectar con otras rutas ciclistas, además de incluir estacionamientos estratégicos en puntos como Tasqueña y Ciudad Universitaria.
También se destaca el impulso a la electrificación del transporte. Proyectos como el autobús eléctrico mexicano Olinia muestran que el país está listo para descarbonizar su sistema de movilidad.
Estas acciones reflejan una visión integral que combina planificación, innovación y sostenibilidad, demostrando que el Mundial puede ser un catalizador para el cambio urbano.
Estos cambios no solo garantizarán una buena experiencia a los visitantes, sino que dejarán beneficios duraderos para la ciudad: más seguridad vial, menor congestión, menos emisiones y mejor calidad de vida.