La apertura de la fábrica de Great Wall Motors (GWM) en Iracemápolis, Brasil estaba pautada para mayo de este año, sin embargo, la misma tendrá que esperar hasta el segundo semestre del año, aunque cuando esté en funcionamiento, será una de las que mayor impacto generará en el país.
Con capacidad inicial de producción de 100.000 unidades al año, la planta de GWM en Iracemápolis está diseñada para adaptarse a las demandas del mercado, pues este nivel de capacidad deposita confianza de GWM en el mercado brasileño.
Además, establece una plataforma sólida para futuras expansiones y mejoras en la capacidad productiva con el objetivo satisfacer la demanda actual para posicionarse estratégicamente en la captura oportunidades de crecimiento en la región.
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Fábrica de GWM en Brasil
La inauguración de la fábrica representará un impulso para el empleo local, con la creación estimada de unos 2.000 puestos de trabajo directos una vez que la planta esté operando a plena capacidad.
Esta iniciativa fortalecerá la economía local de Iracemápolis y sus alrededores mientras contribuye al desarrollo social al ofrecer oportunidades de empleo estables y bien remuneradas.
Además de su impacto económico, GWM ha demostrado un compromiso firme con la sostenibilidad ambiental en el diseño y operación de la nueva fábrica, pues la implementación de prácticas y tecnologías ambientalmente responsables expone a la empresa comprometida con la protección del entorno y el cumplimiento de normativas internacionales y locales.
Finalmente, la empresa utiliza su experiencia y tecnología avanzada en nuevas energías para impulsar transformaciones en la industria automotriz y en los hábitos de consumo en Brasil.
Así, el objetivo es reducir significativamente las emisiones de carbono, contribuyend a la creación de un entorno sostenible y promoviendo un futuro más saludable y limpio para todos.
