BYD ha presentado una de las innovaciones más disruptivas en movilidad eléctrica: su nueva tecnología de carga ultrarrápida. Gracias a su plataforma Super e-Platform, la marca china logra una potencia de carga de 1.000 kW, permitiendo recuperar 400 kilómetros en solo cinco minutos.
Con esta innovación, BYD busca reducir la ansiedad por la carga y acercar la experiencia de repostaje de un auto eléctrico a la rapidez de un vehículo de combustión.
¿Cómo funciona la carga ultrarrápida de BYD?
La nueva tecnología de carga ultrarrápida de BYD se basa en una arquitectura de alto voltaje con componentes optimizados:
- Batería Flash Charging con un canal iónico avanzado.
- Chip de potencia de carburo de silicio (SiC) con 1.500 V de tensión nominal.
- Motor eléctrico de 789 hp con 3¡0.000 rpm, líder en la industria.
Además, la carga ultrarrápida de BYD permite a sus nuevos modelos, el BYD HAN L y BYD TANG L, alcanzar más de 300 km/h con una aceleración optimizada.
Cargadores de megavatios: clave para el futuro
Para soportar esta innovación, BYD ha desarrollado cargadores de 1.360 kW con refrigeración líquida y planea instalar más de 4.000 estaciones en China.
También ha diseñado un sistema de carga dual, que permitirá actualizar los cargadores rápidos actuales a cargadores ultrarrápidos, facilitando su expansión global.
Con esta carga , la empresa no solo acelera la transición hacia la electromovilidad, sino que elimina una de las principales barreras de adopción: los tiempos de carga.
Este avance marca un hito en la industria y promete impulsar la expansión de los vehículos eléctricos en los mercados internacionales.